Hace poco hice un trabajo para la universidad en el que mi compañero y yo abordamos la piratería de una forma diferente a la habitual, analizando por qué ha crecido tanto en los últimos años y qué consecuencias ha traído. Este tema también nos llevó a tratar la innovación en el comercio de contenidos, es decir, los nuevos modelos de negocio que están surgiendo gracias a Internet, como Spotify, Netflix, Voddler, Crackle, Amazon... También dedicamos una buena parte a la oposición a este avance por parte de los grandes intermediarios (productoras, discográficas...).
Estos puntos están brevemente explicados en estos geniales posts en los que nos inspiramos. Como no quiero repetirme demasiado, los enlazo a continuación.
- Receta contra la piratería: disponibilidad y precios razonables - http://bit.ly/sFLem7
- Es el contenido, estúpido - http://bit.ly/ruUmoL
Lo interesante es que, mientras redactábamos el trabajo, mi compañero y yo llegamos a ciertas conclusiones sobre las ventajas que han traído a la sociedad estos años de piratería.
Como comenta Jesús Rodríguez en su post, ofrecer contenidos con alta disponibilidad y precios razonables la haría descender. Pero, ¿qué hace de este método una vía efectiva contra la piratería? Probablemente no la eliminase, pero con una gran oferta de servicios modernos e innovadores de este tipo, está claro que se debilitaría mucho, siendo más fácil atacarla luego desde el Gobierno sin sugerir leyes injustas.
La clave reside en la piratería misma y en cómo ha revolucionado las demandas de los usuarios. Esto es fácilmente explicable si reflexionamos sobre cuáles son las ventajas que nos ofrece sobre el mercado tradicional de contenidos. Tal y como menciona Juan Gómez-Jurado en su post, son:
- Disponibilidad 24/7: sea el instante del día que sea, si se nos antoja ver una película sólo tendremos que gastar medio minuto en llegar a ella. O si nos apetece pasarnos al MP3 una canción que acabamos de escuchar en la radio, es cuestión de minutos localizarla en una red P2P o en un enlace directo y descargarla. En otras palabras, ya no importa la hora, o que sea domingo o festivo y las tiendas estén cerradas. No tenemos que adaptarnos a los horarios de otros.
- Sin restricciones geográficas: estés en el país que estés, o en el pueblo perdido de donde sea, con que tengas conexión a Internet podrás disfrutar de los mismos contenidos que en cualquier otro lugar. Esto significa dejar de preocuparse por los desplazamientos a tiendas o de lo lejos que estén.
- Gratuidad: es cierto que es gratis, pero no es el motivo fundamental por el que la piratería ha crecido brutalmente. Este aspecto entra directamente en conflicto con el mercado tradicional de contenidos, en el que el precio de los mismos está inflado al antojo de los intermediarios. Cuanto más injustos y abusivos sean los precios en las tiendas, más consumidores buscarán vías alternativas.
Como podéis ver, la piratería ofrece a sus usuarios un servicio de calidad que el mercado tradicional no es capaz de igualar. Además, sus usuarios nos hemos acostumbrado a estas comodidades, nuestra demanda se ha transformado y somos más exigentes.
Queremos contenidos, sin importar la plataforma, con una alta disponibilidad para disfrutarlos cuando nos apetezca, donde quiera que estemos y a precios razonables.
Dicha mejora en la demanda de los consumidores es lo que va a llevarnos en una sóla dirección: hacia delante. No vamos a volver atrás, al mercado tradicional o los precios inflados por los intermediarios. No importa cuánta presión ejerzan las discográficas y productoras estadounidenses sobre los gobiernos, como es el caso de España. La piratería seguirá existiendo siempre que no haya suficientes alternativas para satisfacer esta demanda.
El trabajillo completo está colgado aquí (provisionalmente en Megaupload), para el que le interese. Tanto a mi compañero como a mí, la realización de este trabajo nos ha hecho indignarnos con la situación actual de dominio absoluto por parte de los intermediarios, así que ahora estamos muy puestos en el tema.
La asignatura es Ingeniería de la música. Son menos de 10 páginas. La calidad de la redacción no es su mayor virtud, pero es comprensible :)
Imagen por @sjorstrimbach
Gracias por la mención y los enlaces! Estoy de acuerdo con vuestro planteamiento, el problema para los contenidos digitales es que están bajo un monopolio (al final hay 4 discográficas importantes, y unos 3 estudios cinematográficos, unas pocas editoriales) formado por empresas acostumbradas a unos márgenes indecentes, y que exigen condiciones imposibles a los nuevos modelos (las condiciones de las discográficas con Spotify son tremendas, tanto que Spotify está condenado a desaparecer si no cambian)..
ReplyDeleteEsto está en mano de los creadores, que son quienes le dan el poder a estas entidades (antes estaban obligados a hacerlo para no quedarse fuera del canal de distribución, hoy en día eso ya no es un problema).
Ley Sinde, SOPA, ACTA... Son la misma basura legislativa para mantener estos modelos de negocio decrépitos... Y cuidado, porque al final lo que buscan es limitar Internet, en lo que encima tienen el apoyo de las operadoras de telecomunicaciones, que también son para darles de comer a parte...
En el trabajo completo están algo más explicados esos asuntos que comentas, pero no los he querido repetir aquí para no decir lo mismo que he leído en otros posts. Estoy totalmente de acuerdo contigo, por cierto.
ReplyDeleteEn el post, me he centrado en una parte que hemos deducido nosotros, aunque no digo que otras personas no lo hayan hecho antes.